lunes, 1 de octubre de 2007

Baños femeninos...

Lecturas: counter --------------------------------------------------------------------------------


Para todos los hombres que se preguntan que pasa en los baños de mujeres. Mi mama era una fanática de los baños públicos. De chiquita me llevaba al baño, me enseñaba a limpiar la tabla del inodoro con papel higiénico y luego ponía tiras de papel cuidadosamente en el perímetro de la taza. Finalmente me instruía: "Nunca, nunca te sientes en un baño público".

Y luego me mostraba"la posición" que consiste en balancearte sobre el inodoro en una posición de sentarse sin que tu cuerpo haga contacto con la taza.

Eso fue hace mucho tiempo. Pero aun hoy en nuestros años mas maduros, "la posición" es dolorosamente difícil de mantener cuando tu vejiga esta que revienta. Cuando "tenes que ir" a un baño público, te encontrás con una cola de mujeres que te hace pensar que los calzones de brad Pitt están a la venta y a la mitad de precio. Así que esperas pacientemente y sonreís amablemente a las demás mujeres que también están discretamente cruzando las gambas.

Finalmente te toca tu turno. Verificas cada cubículo por debajo para ver si no hay piernas. Todos están ocupados. Finalmente uno se abre y te lanzas casi tirando a la persona que va saliendo. Entras y te das cuenta que el picaporte no funciona; no importa... Colgas tu bolso del gancho que hay en la puerta, y si no hay gancho, te lo colgas del cuello mientras miras como se balancea debajo tuyo, sin contar que te desnuca la correa que te colgaste al cuello, porque el bolso está lleno de mierdas que le fuiste tirando adentro - la mayoría de las cuales no usas, pero que las tenés por si acaso-.

Pero volviendo a la puerta... como no tenia picaporte, sólo tenés la opción de sostenerla con una mano, mientras que con la otra de un tirón te bajas la bombacha y asumís "la posición"...

Alivio....AAhhhhh..... Mas alivio... Ahí es cuando tus muslos empiezan a temblar...

Te encantaría sentarte, pero no tuviste tiempo de limpiar la taza ni la cubriste con papel, así que te quedas en "la posición" mientras tus piernas tiemblan tan fuertes que registrarían 8 en la escala de Richter, sin contar la salpicada finita del chorro que pega en la loza y que te caga hasta las medias ¡¡¡que seguramente se va a notar!!!

Para alejar tu mente de esa desgracia, buscas el rollo de papel higiénico, perooo, jejeje! el rollo esta vacío...!

Tus piernas tiemblan cada vez mas. Recordas el pedacito de papel con el que te limpiaste hace rato la nariz. Eso tendrá que ser suficiente. Lo arrugas de la manera más esponjada posible. Pero es más chico que la uña de tu dedo y encima todavía está mojado...

En eso, alguien empuja la puerta de tu baño y como el cerrojo no funciona recibís tremendo viandazo en la cabeza. Les gritas caliente: "OCUPADOOOO", mientras continuas empujando la puerta con tu mano libre y el pedacito de kleenex que tenías en la mano se te cae exactamente en un charquito que hay en el piso y no estas segura si es agua o mmmm..meo... jeje! y vos te vas de espalda y te caes sentada en el inodoro del baño.

Te levantas rápidamente, pero ya es demasiado tarde, tu culo ya entró en contacto con todos los gérmenes y formas de vida del asiento porque VOS nunca lo cubriste con papel higiénico, que de todos modos no había, aún cuando hubieras tenido tiempo de hacerlo. Sin contar el golpe en la cabeza, el desnuque de la correa del bolso, la salpicada del chorro en las piernas y en las medias, la que te conté, que todavía está mojada... el recuerdo de tu mamá que estaría avergonzadísima de vos si supiera; porque su culo nunca tocó el asiento de un baño público, porque francamente, "vos no sabes que clase de enfermedades podrías agarrarte ahí".
Pero la debacle no termina ahí... ahora el sensor automático del baño está tan confundido que suelta el agua como si fuera una fuente y manda todo al colector con tal fuerza que te tenés que agarrar del tubo que sostiene el papel del baño (cuando hay) por miedo a que te vaya a chupar y vayas a aparecer en china. Aquí es cuando finalmente te rendís. Estás empapada por el agua que salió del baño como fuente. estás exhausta. tratas de limpiarte con un celofán de unos chiclets adams...
Entonces salís inconspicuamente al lavamanos. No sabes como funcionan con los sensores automáticos así que te limpias las manos con saliva, te las secas con una talla de papel y salís pasando junto a la línea de mujeres que aún están esperando con las piernas cruzadas y en stos momentos sos incapaz de sonreír cortésmente. Un alma caritativa al final de la línea te dice que vas arrastrando papel higiénico pegado a tu zapato del largo del Río Santa Lucía...! Tironeás el papel del zapato, lo depositas rudamente en la mano de la mujer que te dijo que lo traías pegado y le decís suavemente: "Tomá... podés precisarlo...!!" y salís.
En este momento ves a tu marido que ha entrado, usado y salido del baño de hombres y que tuvo tiempo de sobra para leer La Guerra y la Paz mientras te esperaba. "¿Por que tardaste tanto?" te pregunta azorado.
Aquí es cuando vos le das una patada en los huevos y lo mandas a la puta que lo parió. Esto esta dedicado a las mujeres de todas partes que han tenido que usar un baño público. Y finalmente les explica a los hombres, porque nosotras tardamos tanto.

No hay comentarios: